Las Esencias de Composición Orgánica, son creadas a partir de las fracciones que componen los aceites esenciales naturales. Cada fracción por separado permite combinarse con otras y formar nuevos aromas. De esta forma, los profesionales dedicados a la elaboración de esencias cuentan con un amplio espectro  de combinaciones olfativas que les permiten crear una composición aromática determinada. El objetivo de esta técnica es emular aromas de absolutos y aceites esenciales, con la misma calidad olfativa, logrando obtener un producto de precio asequible para el consumidor.

Un buen ejemplo para explicar estos productos, es la obtención de la esencia  de la Rosa mediante composición orgánica: para conseguir este aroma, se utiliza el limonene que se obtiene del limón, el geniol que se obtiene del geranio chino, el linaliol que se obtiene del cilantro y el alfa-pinene que se obtiene del pino silvestre. Estas fracciones, debidamente manipuladas y en proporciones acertadas, emulan el aroma de la rosa natural.

A pesar de que los componentes son de origen natural, al intervenirlos mediante una combinación manipulada, pierden sus propiedades terapéuticas, por esta razón no pueden considerarse un aceite esencial natural, sino tan solo esencias destinadas puramente a una utilidad olfativa.

Estas esencias son utilizadas por su aporte aromático, en la producción de cosméticos, jabones,  perfumes profesionales, velas y hornillos.